Los domingos a las 18.30 hs. se presentó en Teatro Anfitrión La boticaria, espectáculo de Verónica Mc Loughlin inspirado en el cuento de Antón Chéjov.
Una noche calurosa en un pueblo, la joven boticaria toma aire. Asomada a la ventana, escucha a dos hombres que se acercan a la puerta de su negocio. Decide bajar y atenderlos y entonces comienza un encuentro que modificará, al menos, esa noche.
La Boticaria es un cuento sobre la soledad y los sueños postergados. Sobre la resignación y la aventura. Sobre la ilusión. Y la vida sin mayúsculas. Esa existencia cotidiana de los que no somos héroes.
Esta es la segunda puesta con dramaturgia y dirección de Mc Loughlin (antes fue la aplaudida «Voto de silencio»).
Este espectáculo fue producido con el Premio S 2009 y con el apoyo del Fondo Nacional de las Artes y de Proteatro.
Más información: www.laboticariateatro.blogspot.com
Dijo la crítica
“La descripción del pueblo, la noche, el calor, la mujer que ha acostado varias veces y que no puede conciliar el sueño (…) tiene un poder impresionante porque hace funcionar la imaginación” Moira Soto, Pan y Teatro
“McLoughlin traslada la acción al campo cercano, ese que podría estar aquí nomás, y aunque señala un tiempo que bien podría ser el presente, tiempo y espacio conducen a evidenciar el pulso que siempre late en el alma de los hombres, expuesto una vez decantada esa poesía hecha de luces sutiles y sonidos alejados y de espacios definidos en el imaginario de cada uno. Y no es nada más que sensibilidad porque en LA BOTICARIA también hay belleza estética: baste recordar una calle de pulida geometría para descubrir en ella la exaltada pasión de un momento inasible, que podría haberse perdido pero que McLoughlin toma entre sus dedos y luego lo deja volar”. Carlos Diviesti, Blog de la Esquina Peligrosa Ver crítica completa
“La puesta (muy bien puesta ¡valga la redundancia!) junto con la dramaturgia del texto corren por cuenta de Verónica Mc Loughlin. Mientras que Marianela Iglesia, Francisco Espinal y Mauricio Minetti dan ruedo a las precisas y simpáticas actuaciones que completan favorablemente aquello que la oscuridad nos había proporcionado (…) Una pieza entrañable y delicada que no se priva de momentos de risa, y donde la pluma del autor ruso aparece y se agradece con tamaña soltura. Porque, como no podía ser de otra manera a lo “chejoviano”, se habla del amor, pero junto a él tienen lugar la soledad, la frustración y la desdicha del mundo terrenal”. Malala González, Funámbulos Ver crítica completa
“La Boticaria es una obra que parte de los acontecimientos fortuitos de personas comunes. No se pretende contar una historia exótica y alucinante. Más bien, se busca inmiscuirse en los anhelos personales de personajes representativos que pudieran ser cada uno de los espectadores (…) La Boticaria genera todo lo que se propone, ilusionar al público con que las grandes transformaciones y cambios de las personas surgen de situaciones sencillas de la vida cotidiana. Una obra imperdible que deja una hermosa sensación a los que desean cultivar y acariciar un espíritu sensible”. Luciano Sáliche, Revista Alrededores, Ver crítica completa
“La escena se explora desde el código lumínico, los espacios e intenciones de los personajes se van abriendo y desarrollando cuando la iluminación les da su oportunidad; mientras que los momentos de oscuridad, a manera de elipsis, sirven pararelatar en off ciertas acciones que revelan a los personajes. Una interesante investigación escénica por parte de la dirección y los actores provocan atraer con una historia sencilla y profunda, algo nada fácil y conmovedor cuando se efectiviza”. Jorge Sandoval, Viendo teatro Ver nota y crítica completa